Vidas Memorables:
Hoy … ED WOOD:
Ed Wood fue un director de cine cuya mejor película está por estrenar, aunque en vida, alcanzó la fama con Plan 9 del espacio exterior.
Ed Wood, no nació a los 11 años de edad como muchos creen, sino que nació como un niño normal en un verano de 1924, concretamente el 10 de octubre de ese año; lo que si le ocurrió a sus 11 primaveras fue que sus padres vieron en el, a un futuro Spielberg y le compraron su primera cámara de vídeo.
Tuvo una infancia indefinida, sus padres deseaban una princesita a la que cuidar y mimar, pero su primer hijo había salido con trompa entre las piernas, para compensar eso, su padre le intento variar de sexo a base de ponerle ropa interior femenina, cómoda y bonita, braguitas y demás, Ed Wood se adapto rápidamente a la suavidad del algodón femenino y a esa presión en sus genitales que tanto gustito le daba, quizá se adaptó demasiado.
Niño prodigio como era este, usó la cámara para grabar su primer corto, el cual tituló “Mi hojo”, corto de escaso presupuesto pero de gran talento interpretativo e imaginativo, que nunca vería la luz pública, quizá por la censura de su época que se negó a distribuir una historia atípica.
Mi hojo
Dura, de forma aproximada, 17 minutos, aunque Wood decidió que imagen y vídeo no contasen la misma historia para deleitarnos con el primer “2 en 1? de la historia del cine. El dialogo de la película, aunque escueto, de tan solo 3 frases, es realmente apasionante, con citas que deberían haber pasado a la historia, el corto comienza con una frase contundente que deja en vilo al más valiente espectador. “Oh my god! what are doing that dog?” (Traducción: Oh dios mio ¿Que está haciendo ese perro?) Como vemos, la frase es ambigua y deja lugar a la interpretación.
Luego podemos oír (recordar que siempre tenemos en primer plano la imagen de un ojo marrón y desenfocado) una serie de risitas varias y algún que otro gemido durante unos 5 minutos, la siguiente frase que pronuncia es “I think the dog is hurting the female.” (Traducción: “Creo que está haciendo daño a esa perra” otros 5 minutos de risas ininterrumpidas) y culmina su primera obra con un final espectacular “How they can´t separated” (Traducción “¡¡¡AHORA NO SE PUEDEN SEPARAR!!!”). El corto finaliza con un fortísimo golpazo que deja inquieto al espectador, una toma de un descampado y unas piernas del joven Wood que suben y bajan mientras este ríe espasmódicamente.
La crítica, a pesar de estar cerrada a su entorno familiar, fue muy dura, muy muy dura, pero el joven Wood aprendió mucho de su primera obra, aprendió que cogía la cámara al revés para empezar y aprendió que sus sueños estarían siempre limitados por productores cerrados y críticos atados a las viejas costumbres.
La 2ª Guerra Mundial fue muy traumática, estuvo varias veces a punto de morir en ella y fue herido en numerosas ocasiones por combatir en el frente, pero siempre tuvo la duda de porque le herían en la espalda, Ed Wood tuvo el record de recibir 148 disparos catalogados como “fuego amigo” todos correspondientes al último mes de combate, justo cuando presumió de su ropa interior (braguitas) a sus compañeros de pelotón y de criticarlos diciendo que eran mucho más cómodas que esos desagradables calzoncillos.
Una de sus anécdotas más divertidas durante su estancia en combate fue durante un asalto salvaje, todos corrían para protegerse tras los sacos de arena y él, como tampoco quería morir, pues hacía lo mismo, pero tropezó y se dejo la mitad de la dentadura en la culata del fusil, sus compañeros reían la broma divertidos y alguno le disparó un par de veces, afortunadamente sobrevivió.
Años después se trasladó a Hollywood embriagado por el sueño dorado americano. Esa época la dedico a actuar en obras de teatro para costearse su estancia al tiempo que buscaba productores que financiaran sus obras.
Le costaría profundamente encontrar a un productor, ya que, a pesar de tener innumerables films (más de un centenar) su mejor obra, con diferencia, fue “Mi hojo” ya que invertir la cámara le había hecho perder calidad de imagen y profundidad en la historia, además de que Wood no solía parar la grabación en ningún momento, así pues se apreciaban interminables paseos en coche entre escenario y escenario, distintos cortes de escena para colocar distintos atrezzos que a él le parecían decorativos como, por ejemplo, en “La danza de las Avejas” que incluyo grandes pelotas de papel de aluminio en una piscina sin que en la historia eso sea realmente necesario. Algunas de sus películas duraban más de 8 horas.
Una noche que le estaba contando sus penas a un tabique de un bar, al cual había confundido con el barman, conoció a Alex Gordon, el cual vio en Wood a un genio borracho, y empezaron a trabajar en varios guiones. Gordon se fascinó con el sistema de trabajo de Wood que permitía escribir varios guiones de películas en una sola tarde, el truco estaba en incluir largos y profundos silencios o bien escenas de mucho ruido aunque no tuviera consistencia con el guión.
Con el tiempo fueron tomando confianza, y Gordon le presentó a Bela Lugosi, un famoso actor que había tenido su apogeo dos décadas antes y que en la actualidad se encontraba en decadencia, Wood estaba fascinado, podría ser su primera obra maestra, una película con actores, aumentó su racha de suerte gracias a que un productor había tenido un infarto al ver “Mi hojo” y había puesto en la cinta “Absolutamente es [rayajo]” su sucesor pensó que iba a poner “estupenda” cuando quería poner estúpida y finació con los ojos cerrados la primera película de Wood.
GLEN O GLENDA
Obesionado como estaba con el travestismo y ponerse ropitas de mujer en 1953 crea GLEN O GLENDA como primer “largometraje” en el que se apagaba la cámara entre toma y toma. Además contaba con un productor, por lo que podría ser la película más cara de toda su historia.
En esos años el travestismo, a pesar de lo que Wood se empeñase en creer no estaba muy de moda, faltaban muchos años aún para que Almodóvar lo convirtiese en algo indispensable en todo film y Wood era un hombre adelantado a su tiempo.
GLEN O GLENDA logró algo impensable en el mundo del cine, aunar crítica y público, todos con la misma opinión, una obra lamentable que nadie pensó que estuviera producida, a pesar de ello, para Wood fue un éxito, fue su primera obra, a su juicio, que supera “Mi hojo”, ¡¡¡Un buen comienzo!!!.
“JAIL BAIT”
El productor de Wood consideró que GLEN O GLENDA había sido una especie de “broma de mal gusto” o una “cagada de un gran director” por lo que decidió arriesgarse nuevamente y darle otra oportunidad
Jail Bait fue su siguiente obra, prácticamente anónima. El tema de moda en esos tiempos era la violencia juvenil y le asignaron el trabajo a Wood, era algo sencillo y sin posibilidades de fracasar. Wood malinterpreto el mensaje y para ahorrar costes decidió que el sería el protagonista. Dejó la cámara con un trípode grabando cerca de una cancha de baloncesto y se acercó tranquilamente al primer chaval que vio. Después de darle de hostias al crió durante 90 minutos y muy satisfecho por el realismo llevo la cinta al productor.
Jail Bait no tuvo ninguna acogida entre el público normal, pero se vendió divinamente entre círculos snuff y sadomaso (ya que el chaval no sobrevivió a la paliza). Wood, sin proponérselo, tuvo varios problemas en la cárcel, a pesar de defender su inocencia la fiscalía tenía suficientes pruebas para condenarle (básicamente tenía una sola prueba, pero duraba 90 minutos), Wood pasó 6 meses en prisión, afortunadamente sus gustos sexuales le ayudaron mucho y para él no fue precisamente un trauma.
A su salida de prisión Wood decidió crear películas más románticas, rollo “Tienes un e-mail” pero con su estilo personal, así, en 1955 nació “La novia del monstruo”
“LA NOVIA DEL MONSTRUO”
En el talego Wood hizo amistad con el hijo de un directivo de la American International Pictures y logro que esta la adelantase una parte del presupuesto de su siguiente obra, estos al enterarse que era una comedia de amor pensaron que quizá fuera fácil incluso para él, pero también eran conscientes de sus últimas creaciones, por lo que eran reacios a patrocinarla entera. Básicamente le dejaron el equivalente actual a 10 cafés, más que nada para quitársele de encima, pero Wood, que era un mago administrando el dinero, logró rodar un cuarto de la película con eso.
A partir de entonces Wood crearía una depuradísima forma de conseguir fondos, simplemente organizaba botellones con los ricos o los hijos de los ricos y, una vez borrachos, los persuadía para financiar lo que el llamaba “la película del siglo”, así fue como conoció al hijo de un empresario, era un actor fracasado pero su padre rebosaba pasta, por lo que a Wood no le pareció demasiado drama ofrecerle el papel protagonista… total… para lo que importaba quienes fueran los actores, lo importante era el mensaje.
Aunque la película era cutre con ansia los espectadores de ese estilo en particular no son muy inteligentes, Wood consiguió más dinero de lo esperado, lo que no se esperaba era que la American International Pictures se lo quedase todo y es que, el film no recaudo nada más que esos famosos “10 cafés”.
Durante un tiempo se dedico a escribir guiones (a una decena por hora) para financiarse su siguiente película, de esa forma, después de más de dos cientos guiones diferentes escritos (en realidad eran el mismo con distinto título) logró vender “The violent years”.
Eso le dio suficiente dinero para crear la que sería su mejor película.
PLAN 9 DEL ESPACIO EXTERIOR
En el 56, su actor fetiche Bela Lugosi la diña después de 5 minutos de interpretación. Eso habría supuesto un contratiempo para cualquier director (el prota muere y habría que volver a elegir uno, volver a grabar esas escenas, etc) pero estamos hablando de Wood, le pareció que el trabajo de Lugosi era lo suficientemente bueno y… total… el público no notaría que se ha cambiado al protagonista.
La película, desde su nacimiento, estuvo abocada al anonimato, pero Wood ya era un veterano en estas lindes y aunque el mismo reconoció esta como su “obra cumbre” y eso, por su experiencia, significaba que ni dios la iba a entender, tenía suficientes contactos, inteligencia y potra como para lograr que esta llegase a teatros y cines, eso si, le costó 3 años de esfuerzo ininterrumpido lograrlo…
3 años para que se emitiese en cines y una cartelera de dos semanas.
Para Wood terminar una película era comenzar otra, así que empezó a parir LA NOVIA Y LA BESTIA, que era básicamente LA NOVIA DEL MONSTRUO, pero con distinto título, de hecho el guión era el mismo.
LA NOVIA Y LA BESTIA
Wood aprendió mucho de su anterior obra, “La novia del monstruo”, aprendió que si te prestan dinero luego quieren recuperarlo y eso no le interesaba, así que esta obra iba a financiársela el solito.
Tuvo escaso éxito, pero dado que el presupuesto invertido fue muchísimo menor, lo cierto es que la película tuvo beneficios.
Dichos beneficios le darían para financiar engendros como “Hellborn” que eran tan cutre que el mismo se dio cuenta que eso no lo iba a poder vender ni aunque tuviera a Tom Cruise y Brad Pitt de protagonistas, por lo que la dejó a medias… total, para lo que había costado grabar lo que llevaban…
Decidió que la idea de “La novia y la bestia” podía dar mucho más de sí y abortó su segunda parte “Night of Ghouls” pero por mucho que persuadió a sus conocidos no logró distribuirla en vida, salió directamente en vhs dos años después de su muerte, se dice que la noche en la que salió al público se oyeron ruidos espeluznantes en el cementerio… se oyó un gemido en la distancia “cabroneeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeees”.
En el 60 rueda “The Sinister Urge” con actores amateur, ya que su elenco habitual le había dejado tirado en busca del siempre productivo mundo de los anuncios matinales de máquinas de ejercicio (Véase Check Norris).
Entre el 63 y el 65 logró vender los guiónes de “Shotgun Wedding”, “Orgy of Dead” y casi una decena de guiones más, así como de un buen número de guiones porno (más complejos de lo que el estaba acostumbrado a crear) e incluso creo novelas de bolsillo.
En los 70 su situación económica, la cual nunca fue muy boyante, empeora, y le da al vermut más que al agua, el miedo a la pobreza le espoleó para crear dos películas más, “Necromanía” y “The only house”, con sus propios vecinos como actores, en clara referencia a su política habitual como director, “el guión y los actores son prescindibles cuando hay una buena historia que contar”. Le dieron un dinerito escaso pero pudo crear con él filmes educativos.
Se pasó a los guiones más que a las películas, creo decenas de obras con el texto original de la novia del monstruo a las que le iba cambiando el título, pero todo lo que ganaba se lo gastaba en botellones con los amiguetes y en pastillas de la alegría. Cuando ya ni podía pagar el alquiler se fue a casa de un colega para poder seguir la fiesta, incluso cambió su máquina de escribir (a la cual le faltaba la E) para conseguir alcohol.
A los 53 años y totalmente arruinado, la muerte en una esquina lo encontró.
Dos años después, la prestigiosa The Golden Turkey Awards le galardonó con el título que lo definía como el peor director de la historia.
Descansa en paz, dulce príncipe.
Poder letal [?] Cronica de una venganza anunciada
Cronica de una venganza anunciada
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